Fragmento

Recibí la Decanatura de la Facultad de Medicina de la Pontificia universidad Javeriana en febrero de 1999. En su carta de nombramiento el Padre Rector me señalaba: “un énfasis especial quiero que se dé, tanto en su facultad como en toda la Universidad, al clima de relaciones interpersonales entre directivos, profesores, personal administrativo y estudiantes”. Fue la constante preocupación de los Decanos tanto Académicos como del Medio Universitario, así como de las Directivas del Hospital Universitario San Ignacio, la de mantener un clima de trato amable y de buenas relaciones entre todos los estamentos tanto de la facultad como del hospital, incluidos los pacientes y sus familias. Merece destacarse como un hecho muy importante en ese sentido, la división del Comité de Investigación y Ética de la Facultad; que hasta el momento había funcionado con regularidad y eficiencia, pero que estaba siendo insuficiente para la cantidad de asuntos a tratar; en dos comités distintos, uno de Investigación propiamente dicho, incluidos sus aspectos éticos y otro Comité de Ética que además de servir para la discusión y toma de decisiones en los casos difíciles, de la práctica profesional, se convirtió en un foro de humanización de la medicina desde el punto de vista del enfermo, de su familia, de su entorno, del médico, del hospital y de los estudiantes de pre y posgrado.

Palabras clave:

2008-01-08   |   617 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 48 Núm.4. Diciembre 2007 Pags. 50-53 Univ Méd Bogotá Colombia 2007; Ed Esp(65 años)