Autor: GarcÃa Espinosa Celso
Estimado Sr. Editor: He leÃdo con gran interés el Editorial: BronconeumonÃa: ¿a qué se refieren los pediatras cuando la diagnostican?, que aparece en el volumen 14, No. 3, julio-septiembre de 2001 de la Revista del INER, que usted dirige. Se trata de un ensayo a propósito de una condición patológica del aparato respiratorio, sumamente frecuente en la edad pediátrica, donde el autor reflexiona sobre el significado que los médicos pediatras confieren al término BronconeumonÃa señalando que no corresponde a ninguna entidad nosológica y que desde el punto de vista radiológico y anatomopatológico corresponde a descripciones de hallazgos desde sus "particulares puntos de vista". En el Ãndice de enfermedades de la Organización Mundial de la Salud, la bronconeumonÃa aparece como entidad nosológica. "BronconeumonÃa no especificada excluyendo bronquiolitis" (registro No. 18.0). En el anuario estadÃstico de la SecretarÃa de Salud se menciona como"neumonÃa y bronconeumonÃa" sin establecer la diferencia. Me permità comentar este escrito con el grupo de neumólogos pediatras, radiólogos y patólogos con quienes comparto el ejercicio de la especialidad, de manera de conjuntar en mi comentario, a manera de consenso, la valiosa opinión de estos especialistas. Encontré que en nuestro medio el término bronconeumonÃa ha sido adoptado con naturalidad para identificar un conjunto de manifestaciones clÃnicas y radiológicas, que frecuentemente se complementan con estudios endoscópicos, y en el caso de contar con biopsia o autopsia, con el estudio anatomopatológico correspondiente. Se trata de pacientes con sintomatologÃa y signologÃa respiratoria, con una imagen en la radiografÃa de tórax que sugiere áreas de condensación pulmonar no uniforme o en "parches" en cuyo seno es posible observar, a manera de un broncograma aéreo, la luz y las paredes de los bronquios, lo cual sugiere inflamación bronquial con retención de secreciones. En el caso de contar con el estudio anatomopatológico el informe describe un proceso de sustitución del aire de los alvéolos por edema y células inflamatorias. Este complejo sindromático se diferencia claramente de la neumonÃa lobar aguda, de las neumonitis intersticiales, de los procesos parenquimatosos pulmonares consecutivos a diseminación linfohematógena y de los fenómenos de atrapamiento de aire de la bronquiolitis y de la alveolitis obliterante. Estamos de acuerdo con el autor en que el término bronconeumonÃa no corresponde a una entidad nosológica especÃfica, lo cual eventualmente confunde al clÃnico, dificulta la integración diagnóstica y consecuentemente el tratamiento de los pacientes. En nuestro concepto el término bronconeumonÃa corresponde a un complejo sindromático donde la caracterÃstica diferencial es el involucro de la vÃa respiratoria en términos de inflamación bronquial y del parénquima pulmonar, no necesariamente infecciosa; un ejemplo caracterÃstico es el del niño con broncoaspiración repetida de alimentos y contenido gástrico que presente sÃntomas respiratorios, signologÃa del tipo de los estertores bronquiales, alveolares y sibilantes, una imagen radiológica que sugiere infiltrado bronconeumónico caracterÃsticamente basal y axilar derecho, un estudio endoscópico con inflamación de la vÃa aérea y presencia de lipófagos en el aspirado bronquial. A partir de este complejo sindromático se deriva la toma de decisiones diagnósticas y terapéuticas que conduce a una amplia gama de posibilidades diagnósticas y terapéuticas. Aprovecho la oportunidad para desear a usted un año venturoso, a la vez que reitero la seguridad de mi colaboración entusiasta. GarcÃa EC
Palabras clave: .
2003-01-08 | 445 visitas | 1 valoraciones
Vol. 14 Núm.4. Octubre-Diciembre 2001 Pags. 249. Rev Inst Nal Enf Resp Mex 2001; 14(4)