Sobre humanismo y medicina

Autor: De Francisco Zea Adolfo

Fragmento

En esta disertación sobre “Humanismo y Medicina”, título del libro que tuve ocasión de publicar hace un par de años, destacaré algunas de las relaciones que existen entre la medicina y las bellas artes, concretamente la música y la pintura. La Medicina tiene como objeto de su acción al Hombre. Definida como la ciencia y el arte de prevenir, curar o aliviar la enfermedad, no tiene como meta la simple prolongación de la vida biológica. Su tarea consiste en postergar la muerte, prevenir o reducir los padecimientos y las deformidades, curar las enfermedades, ampliar las capacidades biológicas y psicológicas de los seres humanos y ocuparse de los sufrimientos de las personas. Para Tristam Engelhardt es la Medicina de las personas. Se concibe a la persona humana como el individuo de conciencia reflexiva normal que es a la vez miembro pleno de la comunidad, con los deberes y derechos que presupone su pertenencia a ella. A esta acepción de carácter moral de la persona humana, que corresponde a lo que se le llama persona “en sentido estricto”, se agrega la acepción social, que hace relación con aquellas personas a las que se otorgan prácticamente los mismos derechos, como es el caso de los niños, de los individuos que perdieron el carácter de persona por padecer de lesiones cerebrales o demencia, y de aquellos que nunca llegarán a serlo como los retrasados mentales profundos.

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2008-03-27   |   1,356 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 22 Núm.3. Diciembre 2000 Pags. 157-162 Medicina Ac. Col. 2000; 22(3)