Fragmento

Introducción La investigación es una de las funciones sustantivas de la asistencia sanitaria de calidad, junto con la enseñanza y el propio cuidado de los pacientes y como consecuencia de ello, se produce un desbalance en las demás funciones de investigación y enseñanza. Se ha intentado explicar esta situación con la carga de trabajo, que con frecuencia llega a ser abr umadora en muchas de las unidades de salud. Sin embargo, éste ya no es válido sino como un pretexto. Queda cada vez más claro que son las fallas de gestión, de organización, de optimización de recursos, las que impiden un adecuado balance de las tres funciones. Pese a ello, en las dos últimas décadas la investigación en las áreas de la salud ha avanzado a nivel nacional y un poco menos a nivel estatal en Sinaloa, en parte debido a los fondos públicos de apoyo a proyectos, a los avances tecnológicos de la información y la comunicación, al empuje de los propios núcleos de investigadores, cuerpos académicos y creadores. La Declaración Universal de Bioética y Derechos Humanos de la UNESCO indica que los beneficios resultantes de toda investigación científica y sus aplicaciones deberían compartirse con la sociedad en su conjunto, mencionando entre ellos el apoyo a los ser vicios de salud; el acceso a los conocimientos científicos y tecnológicos e instalaciones y ser vicios destinados a crear capacidades en materia de investigación. La Declaración Universal indica además que se debería 1 promover el profesionalismo, la honestidad, la integridad y la transparencia en la adopción de decisiones, en particular las declaraciones de todos los conflictos de interés y el aprovechamiento compartido de conocimientos.

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2008-05-15   |   4,293 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 2 Núm.1. Enero-Marzo 2008 Pags. 3-4 Arch Salud Sin 2008; 2(1)