Autor: De Fracisco Zea Adolfo
“El Suicidio y su prevención” es un libro bien concebido, inteligente en su diseño, agradable en su estilo y profundo en su contenido, resultado de los esfuerzos y la dedicación de más de treinta autores liderados por los académicos Cuéllar-Montoya y Sánchez-Medina, en el que el tema del suicidio se aborda desde distintas y variadas perspectivas: desde la biología y la bioquímica hasta la física de las partículas cuánticas; desde la historia, la antropología social y la cultura hasta la bioestadística y la medicina clínica; desde la pedagogía, la psicología normal y la psicopatología hasta la salud pública y el derecho. Los autores del libro y su coordinador merecen el reconocimiento de los que se interesan por estas difíciles materias por sus valiosas contribuciones, que recogidas ordenadamente en un volumen, se constituyen en adelante en fuente de consulta obligada para los estudiosos del problema. En el prólogo que escribí por gentil invitación de las Directivas de la Academia, a cuyos contenidos debo hacer referencia en esta intervención, quise plantear algunas inquietudes personales de índole filosófica que pudieran servir de complemento a las interesantes exposiciones de la obra. Para iniciarlo, me valí de una frase atribuida a Thomas Huxley, el gran biólogo inglés, en la que alude al lugar que ocupa el hombre en la naturaleza. Dice Huxley así: “No somos ángeles caídos; somos antropoides erguidos”.
2008-07-07 | 776 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 30 Núm.1. Marzo 2008 Pags. 43-46 Medicina Ac. Col. 2008; 30(1)