Necesidad de a actualización de la cátedra de enfermedades infecciosas, tropicales y parasitarias en el currículo médico actual

Autor: Neyra Ramírez José

Fragmento

Sr. Editor. Con la experiencia que me dan cerca de 60 años en la docencia universitaria, sobre todo en San Fernando, mi alma mater, estoy también sorprendido y desilusionado y hasta indignado por la desaparición de dicha cátedra desde hace unos 15 años y, desde luego, después de mi jubilación en San Marcos. Esta cátedra fue fundada por Julián Arce en 1916 y fue aprobada por el Consejo de Facultad que presidía el gran Ernesto Odriozola y continuada por Rebagliati, Hugo Pesce, Pedro Weiss, entre otros destacados médicos, que si regresaran a este mundo, se volverían a los infinitos transidos de espanto y decepción. Si sabemos hasta la saciedad que un porcentaje elevado de la morbilidad nacional corresponde a las enfermedades transmisibles con cifras variables según nuestras regiones en las que alcanzan, sobre todo en las menos desarrolladas, cifras elevadísimas e indignas ya en nuestro joven siglo XXI. Entonces, cómo contemplamos pasivamente la desaparición de este curso en los estudios médicos lo que se aúna a la pululación cada vez mayor de nuevas Facultades de Medicina en las que aún no se dispone de profesores especializados con experiencia en el manejo de éstas enfermedades y que dejan pasar una verruga, una lepra o una peste que figuran también en las listas de enfermedades emergentes y reemergentes como la malaria.

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2008-07-25   |   667 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 24 Núm.4. Octubre-Diciembre 2007 Pags. 442-443 Rev Peru Med Exp Salud Publica 2007; 24(4)