Resumen

La meningitis tuberculosa (MTBC) es una de las más temibles formas de tuberculosis del Sistema Nervioso Central. La MTBC empieza de la reactivación de un foco subcortical o meníngeo inactivo de una infección primaria de Mycobacterium tuberculosis. Este foco desarrolla una ruptura hacia el espacio subaracnoideo causando formación de adhesiones, vasculitis obliterativa y encefalitis. Estos eventos pueden producir daños neurológicos y vasculares irreversibles a causa del compromiso de pares craneales (II, IV y VI) y la arteria carótida interna, infarto cerebral y encefalopatía. Se considera que una excesiva respuesta inflamatoria intracerebral es la responsable por el daño neurológico. La dificultad en el diagnóstico y manejo de la MTBC es la razón para encontrar irreversibles secuelas neurológicas en muchos casos. La tinción de Ziehl-Neelsen y el cultivo son los métodos más comunes de diagnóstico. Sin embargo, la tomografía axial computarizada (TAC) o la resonancia magnética (RMN) son alternativas complementarias. Hay otros tests diagnósticos, pero estos son poco específicos o sensibles, además de ser caros, o no estar disponibles. La terapia antituberculosa está recomendada por al menos 9 a 12 meses pero el tratamiento todavía tiene la enorme pregunta acerca de la administración de terapia corticoesteroidea. La meningitis tuberculosa representa un reto clínico a causa de su incierta fisiopatología y la complejidad de su diagnóstico y manejo.

Palabras clave: Meningitis tuberculosa adenosin deaminasa (ADA) mycobacterium tuberculosis tuberculosis extrapulmonar.

2008-07-28   |   14,070 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 11 Núm.1. Enero 2008 Pags. 37-41 Rev Cient Cien Méd 2008; 11(1)