Medicina basada en evidencia: cómo buscar la información médica más válida y relevante

(Segunda Parte) 

Autor: Cuello García Carlos Alberto

Fragmento

Introducción Llega a la sala de emergencias de un hospital de la comunidad Doña Lucinda, una paciente de 75 años que ha presentado mareos repetidos. Tiene el antecedente de padecer diabetes mellitus (bajo buen control con hipoglucemiantes orales); polineuropatía; y dos años antes, tuvo un accidente cerebrovascular (ictus o “stroke”) del cual se recuperó totalmente. La hija de la señora re .ere que Doña Lucinda presentó hace un año un episodio de sangrado gastrointestinal bajo. Al examen físico se le detecta una presión arterial de 172/91 mmHg, palidez en las mucosas, piernas varicosas con edema bilateral de tobillos, sin datos de falla cardiaca. En el electrocardiograma se aprecia una fibrilación auricular con 95 latidos por minuto. La biometría hemática revela anemia con hemoglobina de 10 gm/dL. Usted decide iniciar anticoagulantes dada la fibrilación auricular y el ictus previo. Pero a la hija de la señora Lucinda le preocupa que vuelva a sangrar, sin mencionar la anemia que probablemente ya es causa de un sangrado gastrointestinal bajo. Dado esto, usted y el estudiante de al lado se preguntan ¿Cuántos ictus realmente estoy previniendo con la anticoagulación? ¿Puedo producir en la señora Lucinda más riesgo de hemorragias con los anticoagulantes? ¿Es mayor el riesgo o el beneficio de los anticoagulantes? Preguntas como esta surgen todos los días en las salas de nuestros hospitales y consultas ambulatorias en todos los niveles de atención. Para ofrecer la mayor calidad de atención, el médico debe estar preparado para responder a este tipo de situaciones. Los pacientes, cada vez más informados, merecen y a veces exigen la información más válida y relevante para ellos.

Palabras clave:

2008-10-31   |   905 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 5 Núm.15. Mayo-Agosto 2008 Pags. 34-40 Revista AVANCES 2008; 5(15)