Autor: Pérez Martín Jesús
A pesar de que las enfermedades que ahora se conocen como alérgicas se describen desde la antigüedad, cuando se trataban en forma empírica; tuvieron que pasar muchos siglos para que los espectaculares avances en inmunología íntimamente ligada con la microbiología ayudaran a la prevención de las enfermedades infecciosas que asolaban a humanidad. Fue a finales del siglo XIX e inicios del XX y gracias a las investigaciones de Pasteur, Koch, Erlich, Jenner, entre otros, que se desarrollaron las vacunas para prevenir estas enfermedades. Noon en 1911 las tomó como modelo para iniciar la inmunoterapia, y tuvo bases más firmes al seguir las investigaciones de Dunbar y Wrigth, quienes postulaban que la fiebre del heno era causada por una toxina del polen. En 1906 Von Pirquet introdujo el término “alergia”, basado en sus observaciones de un paciente que desarrolló enfermedad del suero después de la aplicación de suero para la fiebre escarlatina. Años más tarde otro investigador comentó que el artículo de Pirquet no era importante, que era una publicación superflua que había introducido un término nuevo e inútil. Bela Schick, contemporáneo de Pirquet, cuando tenía 80 años (1957) y durante una ceremonia de homenaje y premiación por sus servicios a la humanidad, dijo “espero que los revisores del término alergia que lo calificaron como nuevo e inútil con el tiempo hayan aprendido que cometieron n grave error”.
2008-11-06 | 2,407 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 54 Núm.6. Noviembre-Diciembre 2007 Pags. 187-188 Rev Alergia Mex 2007; 54(6)