Sergio Guzmán Bondiek:

Discurso de homenaje 

Autor: Llanos L Osvaldo

Fragmento

Señor Presidente y miembros del Directorio de la Sociedad, señores Maestros de la Cirugía presentes, señoras y señores: Me siento muy honrado de haber sido designado por la Sociedad de Cirujanos de Chile para rendir el homenaje correspondiente a mi muy querido amigo el Doctor Sergio Guzmán Bondiek al ser nombrado Maestro de la Cirugía Chilena, distinción máxima que otorga la Sociedad. Con frecuencia esta misión se le entrega a un discípulo cercano al maestro, pero en esta ocasión, quizás, por algunas razones, el directorio prefirió que la realizara un par. Una razón podría ser que no habría sido fácil la elección de la persona si se tiene en cuenta la cantidad de discípulos que con gusto expresarían su reconocimiento al doctor Guzmán, y otra, puede ser que, quizás los 47 años, casi medio siglo, que nos conocemos me podría dar alguna ventaja para hacerlo. Sin embargo, es probable que me lo haga más difícil. No quisiera hacer un discurso de homenaje tipo, impersonal. Como dijo García Lorca, al rendir un homenaje a un poeta amigo: “No vengo a hacer falsos halagos, protocolares, muchas veces encubridores de otros sentimientos. No vengo yo en este momento como amigo del homenajeado, Sergio Guzmán en este caso, ni como amigo vuestro, ni a ofrecer este banquete para cumplir un rito gastado con discursos decorados. No vengo tampoco dispuesto a que mi voz la lleve el aire para recibir en cambio, como tantas veces, una bandeja de aplausos coronada por un “muy interesante” de merengue”. Vengo a saludar con reverencia y entusiasmo a mi amigo Sergio a quien merecidamente, la Sociedad de Cirujanos ha decidido que le llamaremos maestro.

Palabras clave:

2009-04-15   |   1,044 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 61 Núm.2. Marzo-Abril 2009 Pags. 119-124 Rev Chil Cir 2009; 61(2)