Autores: Cortés Marín Elkin Alonso, González Sánchez Hugo, Álvarez Mejía Fernando
En el marco de la Ley 693/2001, Colombia inicia la era de nuevos combustibles con la obligatoria mezcla de alcohol–gasolina (5-95%), es decir, se legisla para permitir la libre competencia en la producción, distribución y comercialización de alcoholes no potables. Esto coincide con la implementación de dicho régimen con un elevado precio de la gasolina, producto del alza del petróleo en el mercado mundial y del desmonte de los subsidios a nivel nacional. Este programa de sustitución puede dar lugar a promover el desarrollo agroindustrial a partir del uso productos agrícolas existentes en el país, tales como caña de azúcar, remolacha o yuca, sumado a la abundante normatividad técnica expedida, para regular y controlar. Así mismo, se señalan bondades como la autosuficiencia y sustitución energética, ahorros fiscales, menor contaminación y desarrollo agroindustrial, dado el gran potencial productivo y conocimiento acumulado a partir de la caña de azúcar, en el Valle del Cauca; además de los beneficios técnico a nivel de combustión: mayor octanaje, mejor combustión y en consecuencia ganancias en potencia. Esta nueva oferta de combustible se agrega a la del Gas Natural Comprimido-Gas Natural Vehicular (GNC-GNV) y posiblemente al biodisel. Otro hecho significativo tiene que ver con la compatibilidad de los materiales metálicos y plásticos con la mezcla, la cual ha sido bastante estudiada. De manera general, no representa un problema grave el uso de Etanol, en motores de combustión interna (MCI). Según lo revelado por la mayoría de los constructores de motores y automóviles, la mezcla propuesta, hasta 10% de etanol, y la adición de anticorrosivos puede ser técnicamente adoptada, sin mayores ajustes mecánicos.
Palabras clave: Legislación incentivos biocombustibles caña de azúcar motores de combustión interna (MCI).
2009-05-05 | 3,183 visitas | Evalua este artículo 1 valoraciones
Vol. 3 Núm.2. Julio-Diciembre 2008 Pags. 120-132 CES Med Vet Zootec 2008; 3(2)