Las fracturas de pelvis y de acetábulo son en su mayoría producidas por mecanismos de alta energía, principalmente accidentes automovilísticos y caídas de altura produciendo lesiones que ponen en peligro la vida; se pueden asociar complicaciones urológicas y del abdomen inferior. Pacientes y métodos.- Se hace la presentación de dos pacientes que sufrieron accidentes de alto impacto, en el caso clínico Nº1 se observa, según evaluación, fractura de apófisis transversa izquierda de L2, enfisema subcutáneo toracoabdominal y neumoperitoneo. Con Rx se observa fractura de 8va costilla, diástasis pubiana - subluxación sacroiliaca. Para su tratamiento se realiza el método de la hamaca resultando efectivo, observándose reducción y fijación de la fractura. En el caso clínico Nº2 paciente sufre atricción en región pelviana, se determina diástasis articular sacroiliaca izquierda, alteración del músculo psoasiliaco del mismo lado, fractura en ambas ramas iliopubianas, se observa solución de continuidad en ramas isquiopubianas. Además presentó trauma palpebral-ocular izquierda y TEC leve. Para su tratamiento debido a la complejidad se utiliza tutores externos, los cuales presentaron evolución favorable. Conclusiones. - La fractura de pelvis como se observa en la literatura es más frecuente debido al uso incrementado de automóviles, además que las lesiones de pelvis se deben a mecanismos de alta energía, ya sean las de libro abierto, cerrado o multifracturas en anillo pélvico. Las fracturas estables de pelvis son tratadas con métodos incruentos específicos. El uso de tutores externos es un método eficaz para aquellas fracturas inestables, teniendo cuidado debido a que son propensos a la infección.
Palabras clave: Fractura de anillo pelviano diastasis pubiana tutores externos hamaca.
2009-11-25 | 9,399 visitas | 1 valoraciones
Vol. 6 Núm.1. Junio 2008 Pags. 52-56. SCIENTIFICA 2008; 6(1)