Autores: Chavaro Vicuña Nelly, Arroyo Hernández Gabriel, Felipe Alcázar León, Muruchi Garrón Germán Walter, Pérez Zúñiga Irma
Introducción: El cáncer cervicouterino (CaCu) es la primera causa de muerte por neoplasias malignas en el grupo de 25 a 64 años. La mortalidad por esta enfermedad ha disminuido en los últimos años como resultado del aumento en la disponibilidad de programas de detección oportuna. Existen numerosos avances en el estudio de la etiopatogenia de esta enfermedad, lo que ha permitido conocer el rol del virus del papiloma humano en el desarrollo de lesiones premalignas y malignas del cérvix. Objetivo: Se realiza una revisión acerca de la epidemiología, etiopatogenia, métodos diagnósticos, tamizaje, clasificación y utilidad de los métodos de imagen. Métodos de Imagen: La estadificación del carcinoma cervical es clínica, sin embargo puede apoyarse en los métodos de imagen, sobre todo TC y RM, aunque esta última tiene mejor predilección por su mejor definición, ambos son útiles para estadificar la enfermedad avanzada y detectar recurrencia. Por su parte el PET CT es un método útil en la valoración de ganglios linfáticos, metástasis a distancia y en la valoración de respuesta a tratamiento. Discusión: Esta entidad continua siendo un problema de salud pública, es importante llevar los métodos de tamizaje a todos los sectores de la población para reducir la morbimortalidad por esta enfermedad. Los métodos de prevención con el uso reciente de vacunas han tenido resultados satisfactorios. La evolución en los métodos de imagen ha permitido la mejor estadificación y planeación terapéutica. Conclusión: El diagnostico definitivo del CaCu es histológico, los métodos de imagen son una importante herramienta para la estadificación y planeación quirúrgica, así como en la valoración de respuesta a tratamiento y la detección de recurrencia de esta enfermedad.
Palabras clave: Cáncer cervicouterino virus del papiloma humano métodos de imagen.
2009-11-27 | 2,578 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 8 Núm.1. Enero-Marzo 2009 Pags. 61-79. An Radiol Mex 2009; 8(1)