Autores: Silva Henao Aysa, Támara Pirela Claudia, Álvarez Escobar Astrid, Londoño Luján Marcela, Alonso Palacio Luz Marina
Objetivo: Valorar la calidad de vida relacionada con la salud a través del instrumento SF-36 en sujetos que padecieron enfermedad cerebro–vascular y relacionar estas determinaciones con características sociodemográficas. Materiales y métodos: Estudio descriptivo donde participaron 41 pacientes egresados del Hospital Universidad del Norte y Cari de Alta Complejidad con diagnóstico de ECV isquémico en el año 2007. Se utilizaron 2 instrumentos: Short Form Health Survey (SF-36) y una encuesta sobre características sociodemográficas. Se tabularon los datos en Epi- info V2002 y se aplicaron técnicas de análisis descriptivas. Resultados: Se encontró un mayor compromiso de la función física, promedio de 24.2, en su mayoría presentaban limitaciones. El rol físico, la vitalidad y la salud mental presentaron rangos bajos cerca de (0), que indican malas condiciones de salud. El dolor corporal y la función social con mejores condiciones presentan una media de 67.5 y 69.5. En la salud en general y en el rol emocional existe un balance entre los datos obtenidos, media de 52.8 y 53.6, respectivamente. Conclusiones: La función física fue el ítem más afectado en ambos sexos; presentó rangos cercanos al 0 dentro del cuestionario SF-36. Las dimensiones referidas al dolor corporal y función social mostraron mejores condiciones en relación a las otras; la mayoría de estos pacientes cuentan con el apoyo de familiares para realizar su autocuidado. A medida que se avanzaba en la estructura de edad se revisó el comportamiento de las dimensiones de función física, rol físico y salud mental; se encontró que las dos primeras fueron las más afectadas. Los hombres obtuvieron mejores resultados, superando a las mujeres en casi la totalidad de los ítems evaluadosen el tesd de calidad de vida.
Palabras clave: Enfermedad cerebro vascular calidad de vida SF-36.
2009-12-03 | 1,186 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 25 Núm.1. Enero-Junio 2009 Pags. 73-79 Salud Uninorte 2009; 25(1)