Autor: Castaño Valencia Oscar
Indudablemente la Fisiología Humana viene generando cambios demasiado importantes en la práctica médica y quirúrgica de nuestra profesión. S in duda alguna, con los estudios del Dr. Berner, esta disciplina alcanzó la categoría de ciencia, por su influencia experimental, en un principio francesa y posteriormente norteamericana, puesto que muchos fisiólogos de esta nación viajaron a Paris buscando su dirección. Es bueno recordar, que el Dr. Michell, junto a Caldalton, han sido reconocidos, como los primeros fisiólogos en los E.E.U.U. que efectuaron estudios experimentales en animales, basados ellos en la importancia de la fisiología alemana. Pero fue el Dr. William Henry Welst el fundador de la investigación fisiológica independiente, en la Universidad John Hoppins la cual llevó a que la Universidad de Harvard se convirtiera en la entidad rectora en esta disciplina. La influencia de la fisiología norteamericana fue la pauta para el desarrollo de la regional, en la cual “el Maestro de Maestros” Dr. HERNANDO GONZÁLEZ MONTOYA se destacó en los últimos cinco decenios como fundador de ella, en un principio en la Facultad de Medicina de la Universidad de Caldas, luego en la Facultad de Medicina de la Universidad Tecnológica de Pereira y desde hace diez años, en nuestra Facultad. Resulta oportuno recordar que el Dr. González Montoya, cuando en 1942 se hizo bachiller en el instituto Universitario de Caldas fue clasificado como el mejor bachiller de todo el país, debido a su gran inteligencia, su reconocida dedicación, su don de gentes, su irrevocable vocación de estudios y su gran consagración a la investigación. El Dr. Santiago Gutiérrez Ángel, en el mismo año dirigió una comunicación al rector del Instituto Universitario de entonces, en que textualmente manifiesta: “Entre los 246 aspirantes a ingresar a la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional que fueron clasificados por orden de las notas obtenidas, el joven Hernando González Montoya ocupó el primer puesto”.
2009-12-16 | 831 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 9 Núm.1. Junio 2009 Pags. 7-8 Arch Med Manizales 2009; 9(1)