Autores: Esparza Javier, Hinojosa J, García Recuero I, Romance A, Pascual B, Martínez de Aragón A
Objetivos: Revisar y analizar los resultados y las complicaciones del tratamiento en nuestra serie de 283 casos consecutivos de craneosinostosis, tratados por medio de 330 procedimientos quirúrgicos transcraneales entre los años 1999 hasta el 2007. Pacientes y métodos: La serie consta de 155 escafocefalias, 50 trigonocefalias, 28 plagiocefalias anteriores, 1 plagiocefalia occipital, 20 craneosinostosis múltiples no sindrómicas y 32 síndromes craneofaciales (11 Crouzon, 11 Apert, 7 Pfeiffer, 2 Saethre-Chotzen y 2 cráneos en hoja de trébol). Para la evaluación de los resultados quirúrgicos hemos empleado la conocida clasificación de Whitaker. Por otra parte, para el estudio de las complicaciones, los procedimientos quirúrgicos utilizados se han clasificado en 12 tipos: Tipo I: osteotomías asistidas por endoscopia en las escafocefalias (42 casos). Tipo II: suturectomía sagital y osteotomías expansivas (46 casos). Tipo III: la misma técnica que en el grupo anterior, pero incluyendo el desmontaje frontal o bien osteotomías de la región frontal en escafocefalias (59 casos). Tipo IV: remodelación completa de la bóveda craneal (desmontaje holocraneal) en escafocefalias (13 casos). Tipo V: remodelación fronto-orbitaria sin barra fronto-orbitaria en trigonocefalias (50 casos). Tipo VI: remodelación fronto-orbitaria sin barra frontoorbitaria en plagiocefalias anteriores (14 casos). Tipo VII: remodelación fronto-orbitaria con barra frontoorbitaria en plagiocefalias anteriores (14 casos). Tipo VIII: avance occipital en plagiocefalias posteriores (1 caso). Tipo IX: avance fronto-orbitario standard con osteotomías expansoras (30 casos). Tipo X: desmontaje holocraneal (remodelación completa de la bóveda craneal) en craneosinostosis múltiples (15 casos). Tipo XI: craneotomías occipitales y craniectomías de fosa posterior en craneosinostosis múltiples (10 casos). Tipo XII: distracción fronto-orbitaria (26 casos). Los datos de la estancia media de los pacientes también se han calculado según el tipo de procedimiento. Resultados: La mortalidad de la serie fue de 2 casos entre 283 pacientes. Todas las complicaciones se resolvieron sin déficits aparentes y la edad media de la serie en la primera intervención fue de 6.75 meses. Globalmente y siguiendo la escala de Whitaker, 191 pacientes se clasificaron en Categoría I (67.49%), 51 en la Categoría II (18.02%), 30 en la Categoría III (10.6%) y 14 en la Categoría IV (4.90%). Es decir, en el 85.5% de los pacientes se obtuvo un buen resultado en cuanto al grado de mejoría de la morfología craneofacial mientras que en el 15,5% el resultado fue considerado como pobre. De estos últimos pacientes casi la mitad de los casos (6.36%) eran síndromes craneofaciales, el 2.12% plagiocefalias anteriores y el 1.76% craneosinostosis múltiples no sindrómicas. La complicación más frecuente fue la hipertermia posoperatoria no filiada (13.43%), seguida por las infecciones (7.5%), los hematomas subcutáneos (5.3%), los desgarros durales (5%) y las fístulas de LCR (2.5%). La frecuencia y el tipo de complicaciones aumentaron en número e importancia en el grupo de pacientes reoperados (12.8% de toda la serie): 62.5% de todas las infecciones, 93% de los desgarros durales y 75% de las fístulas de LCR. Considerando los procedimientos quirúrgicos, las osteotomías asistidas por endoscopia en las escafocefalias fueron los que tuvieron menos complicaciones, seguidos de los avances frontoorbitarios standard en las craneosinostosis múltiples, las trigonocefalias y las plagiocefalias anteriores. Los desmontajes holocraneales, tanto en las escafocefalias como en las craneosinostosis múltiples, fueron los que tuvieron complicaciones más frecuentes, así como las técnicas de distracción fronto-orbitaria. Conclusiones: Los mejores resultados se obtuvieron en las craneosinostosis aisladas y los peores en las craneosinostosis múltiples y sindrómicas. El porcentaje y la gravedad de las complicaciones tuvieron relación con el tipo de procedimiento quirúrgico, siendo además más frecuentes e importantes en los pacientes reintervenidos. La estancia media también se comportó siguiendo estos parámetros. Finalmente, hemos podido establecer una serie de normas para el tratamiento de las craneosinostosis, basados en la edad de los pacientes, los resultados y las complicaciones de cada técnica quirúrgica.
Palabras clave: Craneosinostosis cirugía cráneofacial tratamiento cirugía cráneofacial resultados cirugía cráneofacial complicaciones.
2010-01-21 | 2,005 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 19 Núm.6. Noviembre-Diciembre 2008 Pags. 509-529 Neurocirugía 2008; 19(6)