El estrés oxidativo originado por altas concentraciones de radicales libres y especies reactivas, derivadas de radicales o no, se considera causa de daño a los organismos vivos y a sus constituyentes celulares, de cáncer, de infecciones, de envejecimiento y de enfermedades inflamatorias y degenerativas, entre otras. Sin embargo, algunos de ellos, como el óxido nítrico, son necesarios e importantes para los procesos de señalización y otras funciones fisiológicas, como por ejemplo, el mantenimiento del tono vascular y la tensión de oxígeno, y para la producción de eritropoyetina. Los tratamientos e investigaciones se enfocan cada vez más hacia cómo mantener el equilibrio o restablecer la homeostasis de óxido-reducción, para tratar los procesos patológicos y favorecer los fisiológicos.
Palabras clave: Antioxidantes estrés oxidativo oxidación enzimas.
2010-01-27 | 895 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 17 Núm.3. Julio-Septiembre 2009 Pags. 172-179 Rev Asoc Col Dermatol 2009; 17(3)