Autores: Ríos Yuil José Manuel, Samudio Osvaldo
Paciente masculino en la octava década de la vida que acude con historia de cinco años de evolución de presentar una lesión en la región inguinocrural que le causa prurito y dolor al rozar con la ropa. Al examen físico se observó una lesión ulcerada de 3 X 3 cm en la región perineal muy cerca de la raíz del muslo izquierdo. La úlcera presentaba un fondo limpio y los bordes elevados y brillantes. Se realizó una biopsia de la lesión que fue compatible con un carcinoma basocelular bien diferenciado. La lesión fue manejada quirúrgicamente por el servicio de Cirugía Plástica. El carcinoma basocelular es la neoplasia cutánea maligna más frecuente y su incidencia está aumentando. Generalmente, se presenta en zonas expuestas, con folículos pilosebáceos y más del 85% de los casos aparece en la cara, principalmente en la región centrofacial. Aproximadamente en el 5% de los pacientes se localiza en el tronco y, en casos más raros, aparece en el cuello, extremidades y genitales. No afecta palmas, plantas o mucosa oral. Tiene muchas formas clínicas, entre las que se encuentran la forma superficial pagetoide, plana cicatrizal, esclerodermiforme, nodular, ulcerosa, ulcerovegetante y pigmentaria. Histológicamente está constituido por células semejantes a las células basales que se tiñen intensamente con hematoxilina, dispuestas en empalizada, con escasas mitosis y rodeadas de estroma. El tratamiento se escoge dependiendo del tamaño, localización y características histológicas de la lesión. La escisión quirúrgica con márgenes de seguridad de 3–6 mm es la forma preferida de tratamiento.
2010-02-10 | 1,556 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 21 Núm.2. Julio-Diciembre 2008 Pags. 117 Rev méd cient 2008; 21(2)