Autor: Baca García María Teresa
Aunque el término “síndrome de disfunción dolorosa” aún se usa como entidad diagnóstica en la clínica diaria, en la academia se ha puesto en duda su validez en múltiples escritos. Por tanto, se debe tener presente que las diferentes clasificaciones tienen un sentido general de acuerdo con diversos puntos, pero varían significativamente con relación a las suposiciones etiológicas. El sistema de clasificación de la American Academy of Orofacial Pain (AAOP) se ha propuesto como base para discutir de forma correcta la disfunción de la ATM y los trastornos musculares asociados, formando parte este sistema de la clasificación vigente de la International Headache Society. Para facilitar su comprensión, se aclaran los siguientes términos de uso común: • Desviación en forma. Se aplica a irregularidades de los tejidos articulares intracapsulares duros y blandos. No existe dolor y por lo general el ruido articular ocurre en la misma posición condilar en abertura y cierre de la mandíbula. • Bruxismo. Trastorno común del sistema masticatorio. Aunque la participación de la oclusión en él es bastante controversial, a la luz de las propuestas de Martin Addy —quien en 2005 escribió sobre la conveniencia de sustituirlo en la terminología actual por ‘tribología dental (el conocimiento científi co de los fenómenos asociados con la fricción, la lubricación y el desgaste por atrición, abrasión y erosión)— y de John O. Grippo —quien en 1991 introdujo en la literatura odontológica el concepto y término de ‘abfracción’ y que en 2004 ha buscado explicar los procesos patodinámicos de las lesiones por desgaste dental relacionados a mecanismos de estrés por fuerza estática parafuncional y la consecuente fatiga dinámica—, se sigue aceptando que el bruxismo y muchos de los hábitos parafuncionales no asociados con nutrición que afectan el aparato estomatognático están muy relacionados con la tensión, el estrés emocional negativo (distrés) y la frustración, y que pueden disminuirse en forma importante con terapia oclusal como las guardas oclusales o planos de mordida, manipulación de estructuras músculo-esqueléticas de espalda alta y cérvico-faciales y técnicas que aproximen al sistema neuroendocrino al ritmo de umbral theta séptum-hipocampo de 7.83 Hz.
2010-02-18 | 2,618 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 6 Núm.66. Diciembre 2010 Pags. 12-13 Odont Moder 2010; 6(66)