Tratamiento antibiótico precoz para erradicar la infección inicial por Pseudomonas aeruginosa en pacientes con fibrosis quística

Autores: Giugno Hilda, Castaños Claudio, Lubatti Alberto, Pinheiro José L, Hernández Claudia, González Pena Hebe

Resumen

Introducción: La fibrosis quística (FQ) es una enfermedad genética autosómica recesiva que afecta a 1:6000 recién nacidos vivos en nuestro país. La infección crónica por Pseudomonas aeruginosa (PA) se asocia con mayor morbimortalidad y deterioro de la función pulmonar. El tratamiento de la infección inicial puede evitar o posponer la infección crónica. El objetivo primario fue determinar la eficacia y el tiempo libre de PA luego del tratamiento. El objetivo secundario fue determinar cambios en el peso y la función pulmonar. Material y métodos: Estudio prospectivo, observacional, con intervención, no aleatorizado, en pacientes con FQ e infección reciente por PA. Los pacientes con infección por PA recibieron ciprofloxacina oral más colistina aerosolizada. Las variables estudiadas fueron eficacia del tratamiento, tiempo libre de PA, cambios en el peso medido en puntaje Z y en las pruebas funcionales respiratorias, preinfección, durante la infección y luego de la erradicación de PA. Resultados: Se incluyeron 24 pacientes (11 varones). Siete presentaron dos infecciones por PA y recibieron 2 tratamientos. En los 31 tratamientos realizados, 24 (80.5%) pacientes se negativizaron y 7 persistieron con PA. El valor de peso medido en puntaje Z y las pruebas funcionales disminuyeron durante la infección por PA y regresaron a los valores previos luego de ser erradicada. El tiempo libre de PA durante el seguimiento fue de 23.75 meses (IC95% 14.38-32.86). Conclusión: El tratamiento de la infección inicial por PA es muy eficaz. Luego del tratamiento se produce una mejoría del peso y de los valores funcionales.

Palabras clave: Fibrosis quística Pseudomonas aeruginosa infección inicial erradicación.

2010-03-17   |   1,396 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 108 Núm.2. Marzo-Abril 2010 Pags. 141-147 Arch Argent Pediatr 2010; 108(2)