Freud cervantista

Autor: Vives Rocabert Juan

Fragmento

Todo, o casi todo, se ha dicho sobre Cervantes y su obra, principalmente en torno del Quijote, su realización más grande. En este juicio podríamos incluir a los estudios que, desde el psicoanálisis, se han realizado en torno del famoso manco de Lepanto, aunque pensamos que la perspectiva psicoanalítica aún no ha sido suficientemente explorada. Pensamos que la disciplina descubierta por Sigmund Freud puede aportarnos un punto de mira distinto que podría resultar contrastante o complementario con otras formas de leer, abordar y entender el mundo del Caballero de la Triste Figura. Pero más allá de lo que el psicoanálisis aplicado ha aportado al entendimiento de la obra literaria, ahora es el turno de rescatar lo que el autor de La Galatea ha aportado al psicoanálisis, sobre todo si tenemos en cuenta que Freud fue un lector de Cervantes y, con toda seguridad, tomó inspiración en algunas de sus obras maestras. Sabemos, incluso, que aprendió sin maestro a leer el español, con el fin de empaparse de la obra del máximo literato de España y de la literatura en ese idioma. Es necesario recordar, una vez más, que el mundo del Quijote influyó de manera muy especial sobre el creador del psicoanálisis. Sabemos que Freud acudió a la obra de Cervantes al menos en dos ocasiones: la primera durante su adolescencia, y la segunda siendo un joven adscrito a un servicio de psiquiatría que intentaba desentrañar los misterios del delirio, relectura que aprovechó para recomendarle a su novia Martha el Quijote para que se divirtiera con este texto.

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2010-08-06   |   829 visitas   |   1 valoraciones

Vol. 41 Núm.34. Julio-Diciembre 2008 Pags. 98-103 Neurol Neurocir Psiquiat 2008; XLI(3-4)