Fragmento

Parece claro que la actividad médica asistencial se hace en base a hábitos, hábitos frente a situaciones relativamente ciertas y ante situaciones totalmente inciertas. Las conductas en las primeras, situaciones conocidas, se basan en el propio conocimiento. En las situaciones inciertas se basan en la conciencia de la ignorancia. Hay hábitos para ambas situaciones, para las primeras son las aprendidas, para las inciertas el hábito se basará en la capacidad creativa y en una exhaustiva investigación bibliográfica. A los médicos asistenciales se les exigen fortalezas en el aprendizaje y en la tolerancia a la incertidumbre. La tolerancia a la incertidumbre es un fenómeno vinculado a capacidades emocionales que se van desarrollando durante la actividad profesional, siempre que se cuente con suficiente equilibrio emocional. Seguramente en el ingreso a medicina se debiera explorar si se tiene esta fortaleza. Para los conocimientos del médico son fuentes de aprendizaje la experiencia propia y la ajena que nos llega como información. La experiencia propia se gana en el contacto con los pacientes en la asistencia y en la investigación. Quizás sea esta experiencia la mayor responsable de hábitos consolidados. Asimismo, esta experiencia propia es por fuerza limitada y requiere condiciones para la relación interpersonal y capacidad autocrítica.

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2010-09-09   |   634 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 108 Núm.5. Septiembre-Octubre 2010 Pags. 386 Arch Argent Pediatr 2010; 108(5)