Autor: Bravo Borrás Manuel
Se ha puesto mucho interés en la naturaleza e incidencia de las enfermedades dentales y periodontales cuando las personas están infectadas con el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH). Los datos disponibles indican que se trata de afecciones comunes en este tipo de pacientes, sobre todo entre aquellos que consumen drogas vía intravenosa, que poseen una mala higiene bucal, una deficiente atención odontológica y reportan un descenso de la cantidad de células CD4. Un ejemplo de lo anterior es la presencia de eritema gingival lineal Se ha descrito ampliamente en la literatura especializada una gingivitis eritematosa persistente y lineal, que sangra con facilidad, en algunos pacientes seropositivos. Esto puede servir o no como precursor de la periodontitis ulcerativa necrosante (PUN) de avance rápido. La microflora del eritema gingival lineal (EGL) puede parecerse a la periodontitis y no a la de la gingivitis. Y por tanto, las lesiones de la gingivitis lineal ser de naturaleza localizada o generalizada, y: a) limitarse al tejido marginal, b) extenderse hacia la encía insertada en un eritema punteado o difuso o c) extenderse a la mucosa alveolar. Muchas veces el EGL relacionado con el VIH no reacciona al tratamiento correctivo. Sin embargo, dichas lesiones pueden reportar remisión espontánea. Se han identificado anomalías de EGL y candidiasis bucal concomitantes, lo que señala un posible papel causal de las especies de Candida en el EGL. Todavía no se sabe si las candidiasis son causales en todos los casos de EGL. Otro ejemplo es la gingivitis ulcerativa necrosante aguda (GUNA), descrita como un padecimiento de mayor incidencia en los individuos infectados con el VIH, aunque esto no ha sido confirmado por otras investigaciones.
2010-09-28 | 2,023 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 7 Núm.74. Septiembre 2010 Pags. 8-9 Odont Moder 2010; 7(74)