Autores: Moirón María del Carmen, Nadal Mónica, Briozzo Graciela
Introducción: La calidad de una gestión planificada debe residir tanto en el resultado del servicio brindado como en su proceso de prestación. La misión del laboratorio de urgencia es proporcionar el informe de los resultados a la mayor brevedad posible (menor TAT –turn around time–), con la máxima eficiencia, calidad, responsabilidad, ética y profesionalidad, proporcionando al médico un apoyo importante en el diagnóstico y tratamiento. El error en las fases pre y posanalíticas es superior a la analítica. Los tiempos consumidos en estas etapas son los que ocasionan mayores aumentos en el tiempo de respuesta. Los ciclos de mejora deben orientarse a acciones que aumenten el control sobre las mismas. Objetivos: Evaluar errores preanalíticos (administrativos –EA– y técnicos –ET–) y posanalíticos (EPoA) que impactan en la calidad de la atención. Implementar las acciones correctivas convenientes y evaluar la mejora implementada. Materiales y métodos: Se midieron indicadores para evaluar los EA, ET y EPoA durante cuatro semanas. Al mes de implementada la acción correctiva se monitoreó la mejora durante igual tiempo. Resultados: Se obtuvo una clara disminución en los errores pre y posanalíticos luego de implementadas las acciones de mejora, un significativo acortamiento en los tiempos de respuesta y un aumento de la percepción de la calidad en los clientes internos. Conclusiones: El monitoreo de las etapas pre y posanalíticas reveló una disminución del error luego de implementada la mejora. Es importante continuar con las actividades de capacitación para que las mejoras alcanzadas sean sustentables en el tiempo.
Palabras clave: Error preanalítico error posanalítico calidad laboratorio de urgencia.
2010-10-20 | 830 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 29 Núm.2. Abril-Junio 2010 Pags. 61-66 Rev Hosp Mat Inf Ramón Sardá 2010; 29(2)