La palabra INFLAMACIÓN proviene del latín inflammare o inflammatio (encender fuego). Es un proceso donde el organismo lucha contra un agente irritante a nivel de los receptores (nociceptores) y se caracteriza esencialmente por dolor, tumor, calor, rubor e impotencia funcional. Los nociceptores son receptores sensibles al daño, actúan como transductores y conducen impulsos nerviosos a través de pequeñas Fibras A-Deltha (rápidas, mielinizadas) para el dolor agudo, y Fibras C (lentas, amielínicas) para el dolor crónico, hacia el sistema nervioso central. Cuando un tejido es dañado, sus células liberan diferentes sustancias que producen dilatación de los vasos sanguíneos y, por consiguiente, mayor aporte de sangre hacia el área diana. Además, en los tejidos afectados, el exudado inflamatorio incrementa la permeabilidad capilar, migración leucocitaria, presencia de citoquinas y otros procesos locales que excitan e “irritan” las terminaciones nerviosas, imposibilitando el funcionamiento fisiológico de la región. Todo esto dentro de la llamada cascada del ácido araquidónico. La respuesta inflamatoria ocurre con el fin defensivo de aislar y destruir al agente dañino, así como reparar el tejido u órgano dañado; cuando se mantiene de forma crónica hay destrucción de los tejidos locales, siendo difícil el restablecimiento de las funciones perdidas. La inflamación puede ser de corta duración asociada al dolor fisiológico, pero cuando se mantiene mas allá de lo esperado, debe considerarse crónica y es el resultado de la irritación de la neurona a nivel de los receptores por un tiempo prolongado, con períodos de mayor o menor intensidad. En tal estado es necesario un tratamiento eficaz, evitando efectos secundarios. En este trabajo se discute la importancia del control clínico de la inflamación, con formulaciones específicas para diferentes localizaciones, utilizando mediadores tales como hormonas, neuropéptidos y otros, con dosis equivalentes a las presentes en el organismo, con la intención de restablecer las óptimas condiciones biológicas, evitando efectos colaterales indeseados, de acuerdo con la Medicina Fisiológica de Regulación.
Palabras clave: Dolor inflamación irritación neuronal ciclooxigenasas interleukinas b-endorfina.
2010-12-07 | 1,047 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 7 Núm.5. Agosto 2010 Pags. 4-8 Dol Foro Nal Invest Clín Méd 2010; 7(V)