Autor: Becerril Ángeles Martín H
Los lectores de revistas médicas esperan que los investigadores, clínicos y editores sean honestos y confiables. De hecho, la mayor parte de la información científica publicada se genera de una manera honesta, pero hay una minoría deshonesta entre las publicaciones. Con el fin de regular y mantener las buenas prácticas de publicación en revistas médicas –y en su caso sancionar desviaciones– hay varios organismos con influencia internacional y local, como el Committee on Publication Ethics, creado en Inglaterra en 1997; la Office of Research Integrity, fundada en Estados Unidos en 1992; el International Committee of Medical Journal Editors, la World Association of Medical Editors y, en nuestro país, la Asociación Mexicana de Editores de Revistas Médicas. La responsabilidad ética de las publicaciones científicas involucra a los editores, revisores, autores y a las compañías editoriales. Los editores deben mantener la integridad científica, ganar lectores, operar sin pérdidas, asegurar los estándares éticos y la confidencialidad de los pacientes, principalmente. En el caso de los revisores es importante mantener la confidencialidad y no hacer mal uso del material que revisan, entregar oportunamente sus informes y evitar que el celo o la rivalidad profesional influyan en el análisis de los manuscritos. Los autores, a su vez, deben abstenerse de conductas no éticas, entre ellas los conflictos de autoría (orden, coerción, autores honorarios y “fantasma”), defectos metodológicos que afecten los resultados, desapego a las normas éticas (consentimiento informado, confidencialidad, regulaciones en animales), manipulación de imágenes, declaración incorrecta de conflicto de intereses, publicaciones duplicadas o redundantes, plagio y falsificación de datos.
2010-12-09 | 1,107 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 57 Núm.4. Julio-Agosto 2010 Pags. 105-106 Rev Alergia Mex 2010; 57(4)