Comprender y aprovechar la relación del conocimiento científico y tecnológico con el bienestar social, ha sido siempre la mayor preocupación de la investigación. Son las habilidades para crear y aplicar el conocimiento las que caracterizan las sociedades, y es a través de ellas que se promueve la actitud innovadora y el mejor aprovechamiento de las grandes oportunidades que el cambio tecnológico nos ofrece, pero somos conscientes, además, de las consecuencias que pueden acarrear. Dependemos, y seguiremos dependiendo cada vez más, de la fuente de riqueza inagotable que representa la tecnología y la innovación. Actualmente, el sector académico revela una singular capacidad de transformación que, aunque no es tan rápida como se desearía, es ejemplo de la creciente vitalidad.
Palabras clave: .
2011-01-25 | 1,040 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 29 Núm.2. Julio-Diciembre 2010 Pags. 85-86. Med UPB 2010; 29(2)