Resumen de los aspectos destacados de las guías de la American Heart Association de 2010 para Reanimación Cardiopulmonar y Atención Cardiovascular de Emergencia

Autor: Sanchez Baya Maya

Fragmento

El presente artículo, resume los principales cambios de las guías de la American Heart Association (AHA) del año 2010 para la aplicación de la Reanimación Cardiopulmonar (RCP) y Atención Cardiovascular de Emergencia (ACE), basándose en una evaluación extensa de evidencia internacional sobre reanimación. La publicación de estas guías coincide convenientemente con el 50 aniversario de la primera publicación médica con revisión científica externa, en la que se documentó la supervivencia tras la compresión torácica cerrada, para el paro cardíaco. Desde la publicación de las Guías de la AHA de 2005 para RCP y ACE, muchas comunidades y sistemas de reanimación en el mundo han documentado un incremento en el nivel de supervivencia en víctimas de paro cardíaco; las nuevas guías proponen incrementar la frecuencia de realización de la RCP por testigos presenciales, elevando la calidad de la misma y dar un nuevo énfasis a todos los cuidados posparo cardíaco, a cargo de equipos organizados formados por miembros que hagan un buen trabajo en equipo. Los aspectos principales de las guías de la AHA 2010 para RCP y ACE, que se aplican para todos los reanimadores, sean profesionales de salud o reanimadores lego (novatos) incluyen: Constante énfasis en la RCP de alta calidad. Realizar RCP con una frecuencia de compresión de al menos 100 por minuto, una profundidad mínima de dos pulgadas ó 5 cm en adultos (al menos 4 cm. en lactantes y por lo menos 5 cm. en niños), que permitan una expansión torácica completa después de cada compresión, reduciendo al mínimo las interrupciones de las compresiones torácicas y evitando una ventilación excesiva. Se mantiene la relación compresiónventilación en 30:2 para un solo reanimador en adultos, niños y lactantes (excluyendo recién nacidos). Esto debido a que la calidad de las compresiones torácicas aún debe mejorar para aumentar la supervivencia, que es muy variable en un paro cardíaco extrahospitalario entre los distintos Servicios de Emergencia Médica (SEM).

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2011-02-09   |   825 visitas   |   1 valoraciones

Vol. 13 Núm.2. Julio-Diciembre 2010 Pags. 101-103 Rev Cient Cien Méd 2010; 13(2)