Autor: Barile Fabris Leonor Adriana
La artritis reumatoide (AR) es una enfermedad autoinmune en la que el sistema inmunológico ataca a la membrana sinovial —tejido que recubre las articulaciones— principalmente por linfocitos T y B, que conforme actúan generan inflamación y destrucción de los cartílagos. Su evolución crónica, generalizada e inflamatoria, afecta predominantemente a las articulaciones y su etiología es desconocida. Su prevalencia a nivel mundial es del 1%, en una relación de tres mujeres por cada hombre. De tal forma que al año se presentan 20 millones de casos nuevos, lo cual significa que tan sólo en nuestro país se cuenta con más de un millón. Dicha alteración afecta a personas entre 30 y 50 años de edad, de los cuales 75% son mujeres. Los síntomas generales de esta patología son fiebre, pérdida de peso, poca energía, pérdida del apetito, cansancio, dolor, hinchazón, entumecimiento matutino, deformidades y discapacidad. Otros son los nódulos de tejido bajo la piel, alteraciones oculares, inflamación de los vasos sanguíneos (úlceras en la piel), inflamación de los tejidos que rodean los órganos blandos como el corazón y pulmones. Además el paciente puede presentar el síndrome seco o sequedad en ojos, boca y piel, anemia y osteoporosis.
2011-03-08 | 657 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 33 Núm.397. Diciembre 2010 Pags. 1 y 5 Prescripción Médica 2010; 33(397)