Autores: Micheletti Leonardo, Preti Mario, La Monica Fabio
El objetivo de este trabajo es demostrar que la vulvoscopia no debe ser concebida como el examen colposcópico de la vulva. La transposición de los conocimientos y la técnica colposcópica del cuello uterino a la vulva se derivan de la cultura ginecológica al creer que, en analogía con el cuello uterino, la colposcopía de la vulva puede ser esencial en el diagnóstico de los trastornos de la vulva. Sin embargo, la vulva es principalmente cubierta por un epitelio cutáneo con alto grado de queratinización, como consecuencia de alteraciones vasculares, tales como punteados y los patrones de mosaico, no fácilmente se desarrollan en la piel vulvar. Esta es la razón por la que la vulvoscopia puede mantenerse, pero debe ser concebido como un hecho compuesto de diagnóstico integrado de cuidado a simple vista y bajo consumo de energía magnificada examen llevado a cabo por ginecólogos o colposcopistas con preparación interdisciplinaria (ginecología, dermatología y patología) el conocimiento y la experiencia . Por otra parte, el uso liberal de ácido acético no agrega nada que pueda ser observado por una inspección cuidadosa a simple vista, pero a veces puede inducir a error en la provocación de reacciones frecuentes inespecificas acetoblancas. Del mismo modo, la prueba del azul de toluidina no tiene más espacio en un enfoque vulvoscopico correcta.
Palabras clave: Vulvoscopia colposcopia acido acético azul de toluidina.
2011-04-08 | 5,661 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 3 Núm.4. Abril 2011 Pags. 29-34. AMATGI 2011; III(4)