Autor: Magaña Garcia Mario
Es una enfermedad inflamatoria crónica, propia y casi exclusiva de la niñez, caracterizada por un bajo umbral al prurito y por áreas de dermatitis de localización peculiar; es de etiología desconocida, aunque quizá determinada genéticamente. Ha recibido otras denominaciones como: prurigo de Besnier, eccema constitucional, eccema atópico, neurodermatitis y neurodermatitis atópica o diseminada. Es uno de los principales motivos de consulta, ocupa el primer lugar en frecuencia con 12.9% en la Clínica de Dermatología Pediátrica del Hospital General de México. La observamos más en el grupo de 1 a 4 años (45%) y de 5 a 14 años de edad (37%). Después de los 14 años de edad sólo se encuentra en 0.5%. Clínicamente la dermatitis atópica (DA) se caracteriza por prurito intenso y por placas de dermatitis, es decir, eritema y vesículas, con o sin trasudado seroso; es lo que el eccema, que representa las fases aguda y/o subaguda. Las lesiones iniciales o tempranas son las mencionadas placas de eccema y prurito. El rascado y el frote conducen a la aparición de las placas de dermatitis. Conforme se hace crónica, hay eritema y pápulas, usualmente con costras hemáticas porque reflejan el rascado, consecuencia del prurito.
2011-05-19 | 1,018 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 34 Núm.400. Marzo 2011 Pags. 1,2 y 4 Prescripción Médica 2011; 34(400)