Primer hallazgo de infección humana por Paracapillaria (Crossicapillaria) philippinensis (Chitwood, Velázquez y Salazar, 1968) en Cuba

Autores: Núñez Fernández Fidel Ángel, Espinosa Rivera Fidel, Astencio Rodríguez Gloria, Chacón Medina Ada Iris, Atencio Irais Virgina, Medell Gago Manuel

Resumen

Introducción: La infección por Paracapillaria philippinensis (Capillaria philippinensis), se caracteriza clínicamente como una enteropatía progresiva, con pérdida masiva de proteínas y un síndrome de malabsorción que puede llegar a ser mortal. Objetivo: Reportar por primera vez en Cuba el hallazgo de infección humana por P. philippinensis. Métodos: Se describió el caso de un paciente de 21 años de edad, del sexo masculino, procedente de Ciudad de La Habana, y que nunca había viajado fuera del país. Ingresa porque después de la ingestión de un pescado empanado comenzó a presentar un cuadro diarreico que se fue intensificando con el transcurrir de los días, llegando a tener más de 15 deposiciones líquidas diarias, abundantes en cantidad, sin flemas ni sangre, acompañado de un cuadro de desnutrición severa, y síntomas generales de astenia y anorexia intensas. Resultados: El diagnóstico de laboratorio confirmó la presencia en heces de huevos de P. philippinensis. Conclusión: Las características clínicas del paciente y el hallazgo de una eosinofilia moderada, coinciden con lo descrito en la literatura. En nuestro conocimiento, este es el primer hallazgo de infección autóctona por P. philippinensis en humanos que se realiza en Cuba, y en el continente americano. Es importante la alerta epidemiológica sobre la posible emergencia de esta parasitosis en nuestra zona geográfica, sobre todo en aquellos lugares donde la costumbre de comer pescado crudo o mal cocido sea parte del contexto cultural.

Palabras clave: Capillaria philippinensi Paracapillaria philippinensis capilariasis paracapilariosis Cuba América primer reporte.

2011-05-19   |   926 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 62 Núm.2. Mayo-Agosto 2010 Pags. 125-129 Rev Cubana Med Trop 2010; 62(2)