Autor: Reyes Acevedo Rafael
El desarrollo de los modelos de trasplante de órganos son prodigios –sin adjetivo alguno– que han revolucionado el ejercicio de la medicina contemporánea. Si tratamos de conocer cuáles fueron las razones por las que los pioneros del trasplante decidieron orientar sus esfuerzos a lo que parecÃa claramente una aventura absurda, seguramente encontraremos enormes dosis de curiosidad cientÃfica, frustración ante la incapacidad de resolver graves problemas de salud y, ante todo, una indoblegable tenacidad. Se atestiguaron los primeros éxitos –acompañados de no menor cantidad de fracasos– y se entendió que sà era posible trasplantar un órgano, el sueño de la quimera se vislumbraba como una realidad. Vino después una larga etapa de consolidación –tan larga que quizás no ha terminado aún– en donde los pioneros, en todo el mundo, debÃan ser capaces de mostrar que los diversos modelos de trasplante no sólo eran factibles, tenÃan que ser reproducibles y además debÃan ser aplicados en forma universal.
2011-06-20 | 876 visitas | Evalua este artÃculo 0 valoraciones
Vol. 63 Núm.2. Marzo-Abril 2011 Pags. 120-123 Rev Invest Clin 2011; 63(2)