Resumen

Antecedentes: La falta de coordinación en la relajación del esfínter esofágico superior e inferior, produce aumento de la presión intraluminal y protrusión de la mucosa con la formación de divertículos. Métodos: Se revisaron los expedientes de pacientes con diagnóstico de divertículos esofágicos durante 1987 a 1997. Se realizó análisis del cuadro clínico, el tiempo de evolución, los métodos diagnósticos, las enfermedades asociadas, el tratamiento y las complicaciones. Resultados: Se estudiaron siete mujeres y dos hombres con edad promedio de 62 años. La disfagia y la regurgitación fueron los síntomas más frecuentes. A todos se les realizó esofagograma y endoscopia. Fueron localizados seis divertículos en tercio superior, uno en tercio medio y dos en el inferior. Estos dos últimos con imagen de acalasia, por lo que se les tomó manometría que corroboró el diagnóstico. Cinco pacientes sometidos a diverticulectomía más miotomía, uno a septumplastia endoscópica y dos se trataron con la funduplicatura y miotomía tipo Heller. Ningún paciente falleció secundario al procedimiento. Conclusiones: El divertículo faringoesofágico es el más frecuente. El esofagograma es el estudio diagnóstico más específico. El tratamiento debe ser quirúrgico en pacientes sintomáticos.

Palabras clave: Divertículos esofágicos diverticulectomía.

2003-02-03   |   1,739 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 67 Núm.2. Marzo-Abril 1999 Pags. 54-58 Cir Ciruj 1999; 67(2)