Validación de la utilidad clínica del catéter articulado orotraqueal en salas de cirugía y cuidado intensivo

Autor: Riveros Pérez Efraín

Resumen

Objetivo: Evaluar la utilidad clínica del catéter orotraqueal articulado (COA). Escenario clínico: Salas de cirugía de la Clínica San Pedro Claver de Bogotá, entre febrero y agosto de 2007, salas de cirugía del Hospital Universitario Mayor de Bogotá, entre septiembre de 2007 y julio de 2008, y Unidad de Cuidado Intensivo de la Clínica Especializada de los Andes en Tunja, entre septiembre de 2008 y abril de 2010. Materiales y métodos: Después de diseñar un estudio transversal descriptivo, se recogieron datos de 71 pacientes. Anestesiólogos y residentes de anestesiología diligenciaron 22 (30%) y 49 (70%) formatos respectivamente, cuando se empleó el catéter articulado orotraqueal. El catéter articulado orotraqueal hacia parte del algoritmo de vía aérea difícil en ambas instituciones. Se hizo análisis del comportamiento clínico del catéter articulado orotraqueal. Resultados: El catéter articulado orotraqueal fue insertado de manera exitosa en la tráquea en el primer intento hecho por el primer médico en 70 de 71 pacientes (98.6%). Solamente en un caso (1.4%) no fue posible avanzar el catéter, y en otro (1.4%) se pudo avanzar, pero no se pudo deslizar el tubo traqueal en el primer intento. La tasa de éxito del primer médico se vio fuertemente influenciada por el grado de dificultad en la laringoscopia directa. En el primer intento del segundo médico, los dos pacientes fueron intubados exitosamente. En 4 pacientes (5.6%), se detectó trauma de la vía aérea evidenciado por salida de secreciones sanguinolentas a la aspiración del tubo traqueal. Conclusiones: El catéter articulado orotraqueal es altamente efectivo para realizar la intubación traqueal, pero, potencialmente, puede ser causante de trauma menor de la vía aérea.

Palabras clave: Laringoscopía intubación intratraqueal catéteres tráquea.

2011-09-01   |   735 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 39 Núm.3. Agosto-Octubre 2011 Pags. 330-339 Rev col anest 2011; 39(3)