Acné, un enfoque cambiante

Autor: Orozco Beatriz

Fragmento

La dermatología y el estudio de la piel, normal y afectada, han ido cambiando con el tiempo y el avance de la medicina. Han pasado de la forma descriptiva, que permitía clasificar en grupos a las enfermedades por sus características clínicas e identificar enfoques y tratamientos, a una forma más científica basada en el entendimiento de la causa y la respuesta inmunitaria a las diferentes afecciones. En el acné, y en las dermatosis en general, el estudio de la dermatología se ha basado clásicamente en descripciones semiológicas, y las imágenes diagnósticas, los atlas dermatológicos y los pacientes afectados han aportado buena parte de la formación del buen ojo clínico del dermatólogo en el diagnóstico y el tratamiento. Sin embargo, la dermatopatología ha cambiado muchos de los conceptos que se tenían de las enfermedades cutáneas y ha permitido reorganizar las clasificaciones, al conjugar lo clínico con los hallazgos del estudio anatomopatológico del tejido. El avance en los conocimientos médicos de la inmunología y de la respuesta de nuestro organismo a los diferentes retos antigénicos, propios o exógenos, sigue abriendo nuevos horizontes en el entendimiento de las enfermedades dermatológicas y ha conducido al descubrimiento de nuevos tratamientos, cada vez más específicos y más enfocados a tratar la enfermedad en su sitio de origen. El acné es una entidad muy conocida por los médicos dermatólogos y, de hecho, en la actualidad es la primera causa de consulta dermatológica. Existen muchos productos –y cada día se producen más de ellos– orientados a tratar este problema que, algunas veces, es simple, pero que puede revestir características diferentes según el compromiso generado y las secuelas que deja, como las cicatrices definitivas.

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2011-09-01   |   609 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 19 Núm.2. Junio 2011 Pags. 96-97 Rev Asoc Col Dermatol 2011; 19(2)