Fragmento

La Residencia en el comienzo de un camino, la Jefatura es el final de ese camino, entre ellas hay un período de tiempo de 15 a 20 años en la cual el Residente se prepara para afrontar ese compromiso, que se le presentará una vez en la vida y debe hacerlo bien, y cuando llegue el retiro o la jubilación, y torne la vista hacia atrás debe ver un Servicio o Unidad funcionado bien, una construcción solida y eficiente, no un montón de escombros. Un Residente competente tiene dignidad, no es servil, construye su porvenir, no pierde tiempo, absorbe todo el conocimiento, tiene una relación adecuada con los otros residentes, su pensamiento es claro y ordenado, su expresión es clara, comprensible y ordenada, el trato con los pacientes es cordial, respetuoso y considerado, sabe que además de un caso, es una persona, recuerden las palabras de Hombre Elefante en la película del mismo nombre: “Yo no soy un animal, yo soy un ser humano”. Evita la iatrogenia de la palabra por lo cual no hace a los pacientes comentarios imprudentes o inoportunos. Se expresa con buena dicción y escribe con una adecuada sintaxis y correcta ortografía. Domina la computación y el Internet, revisa las publicaciones on-line y las revistas de la especialidad, hace fichas bibliográficas y mantiene un archivo ordenado y completo para consultarlo cuando sea necesario. Almacena copias de los artículos interesantes en orden cronológico y alfabético para revisarlos en caso de necesidad. Guarda las imágenes radiológicas, endoscópicas y ecográficas para consultarlas ante alguna duda. Organiza, planea y lleva a cabo trabajos de investigación, recopila datos, establece el método, analiza los resultados, y los redacta y los presenta en los Congresos de la especialidad, admitiendo las críticas constructivas. Evita el cigarrillo, la ingesta de alcohol y la droga-adicción. En su conducta no tiene envidia, no origina murmuraciones ni chismes. Se cuida de actitudes antiéticas de Mata-Haris o Casanovas de consultorio. Hace deporte con regularidad y no usa los tres NO del venezolano: NO SE, NO HAY Y NO ME TOCA. Lleva un archivo de sus credenciales y su curriculum ordenado. Busca la excelencia y la originalidad, se prohíbe a si mismo el conformismo No le da terreno a la ignorancia y a la mediocridad. Es aseado, limpio y tiene un aspecto normal aun vestido en forma casual. No tendrá éxito el residente que parezca un recogelatas, tenga aliento etílico o de conducta errática por estar drogado. Un Adjunto realizado comenta y critica los trabajos en los Congresos, es tutor de los trabajos de grado, revisa temas para las revistas de la especialidad o dicta conferencias en los Congresos, forma parte de las Junta Directiva de las Sociedades Nacionales e Internacionales, es docente en los Cursos de Post-Grado y coordinador de ellos.

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2011-10-17   |   821 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 65 Núm.3. Julio-Septiembre 2011 Pags. 248-249 Revista GEN 2011; 65(3)