Directorio de la Sociedad Chilena de Medicina Intensiva, preocupado por déficit de especialistas en su área

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El Directorio de la Sociedad Chilena de Medicina Intensiva, está preocupado por el déficit de especialistas que existe en esta área. Por ello, en términos de gestión hemos tomado como uno de nuestros ejes rectores impulsar cambios en esa dirección. Para lograr este objetivo esperamos contar con el apoyo y participación activa de todos ustedes y captar la atención, mediante el aporte de ideas e información, de aquellos que están fuera y dentro de la Sociedad. La autoridad, a quien le comunicamos y transmitimos este enfoque, acogió la inquietud y se comprometió a trabajar en desarrollar políticas para incentivar la capacitación y estabilización de los equipos profesionales que se desempeñan en Cuidados Intensivos. Para contar con información que nos permita avanzar en el camino propuesto, queremos solicitarles que nos respondan una encuesta electrónica destinada a jefes de UCIs y UPCs, que nos permitirá tener un catastro de las características de los médicos que están trabajando en UCIs, con el objetivo de respaldar esta línea de trabajo. El documento de consulta llegará al correo de cada jefe de UCI desde la SOCHIMI, y se agradecerá que lo contesten en los términos que allí aparece. Una vez que estén los resultados, este trabajo será socializado con todos ustedes. Descripción de la situación: En la actualidad las expectativas de la población respecto a seguridad, resultados y calidad de atención se han incrementado y, a su vez, la práctica médico-quirúrgica ha evolucionado en muchos sentidos. La sofisticación de los cuidados médicos permite abordar con intención curativa a enfermos más añosos, más graves, más frágiles y con coexistencia de enfermedades. Hay un evidente aumento del alcance de la oncología, el manejo del trauma, los trasplantes y los medios de soporte vital.

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2011-10-21   |   511 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 25 Núm.3. Julio-Septiembre 2010 Pags. 145-146 Rev Chil Med Inten 2010; 25(3)