La Sociedad Chilena de Medicina Intensiva, cuyos miembros manejan pacientes graves, con estrecho margen de maniobrabilidad y con riesgo de vida, observa con atención la incorporación por ley del uso de medicamentos genéricos “que hayan demostrado su equivalencia terapéutica”. Valoramos el rol social de la existencia de medicamentos genéricos equivalentes a los productos originales o innovadores, pues con ellos se amplían las opciones de tratamientos para la población y podrían reducirse sus costos. Naturalmente es premisa básica garantizar esta equivalencia clínica. Apreciamos también el inestimable valor que hay en la innovación, que implica el largo, riesgoso y caro proceso científico de investigación y desarrollo de medicamentos. Así también entendemos cómo las leyes contemplan el principio de protección a la propiedad intelectual, garantizando formalmente la posibilidad de recuperar el costo de desarrollo del producto innovador, dejando un incentivo para la investigación futura. La OMS define dos productos como terapéuticamente equivalentes “si éstos son farmacéuticamente equivalentes y si después de la administración en la misma dosis molar, sus efectos en términos de eficacia y seguridad son esencialmente los mismos, determinados por estudios apropiados de bioequivalencia, farmacodinamia, clínicos o in vitro”. Sin embargo, las versiones genéricas de las formulaciones inyectables, entre las que se incluyen los antimicrobianos, no tienen como requisito demostrar equivalencia terapéutica como el producto innovador, dado que se asume su absorción y circulación en los humores corporales como algo evidente o implícito, sin embargo cada vez más asistimos a reportes, publicaciones y evidencias que apuntan a que la equivalencia farmacéutica no es garantía de equivalencia terapéutica, valga decir buenos resultados de tratamientos y ….
2012-02-08 | 493 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 25 Núm.4. Octubre-Diciembre 2010 Pags. 211-212 Rev Chil Med Inten 2010; 25(4)