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Utilizada en nuestro país desde hace más de 20 años, la ecocardiografía Doppler se ha convertido en una técnica muy versátil. Indispensable en la cardiología moderna, aporta información acerca de las patologías cardiovasculares en diferentes momentos: estado crónico o agudo, etapa inicial o tardía, pre, trans y posoperatorio, etcétera. Es un recurso de enorme utilidad para el diagnóstico, tratamiento, control y seguimiento del paciente cardiópata, sobre todo cuando lo efectúa un experto en su técnica y en patología cardiovascular. Hay quienes lo consideran ya complemento del examen físico. A través del tiempo la cardiología se ha auxiliado de la tecnología contemporánea para su quehacer diario, tal sucede con la ecocardiografía Doppler. La ecocardiografía es la técnica diagnóstica que emplea el ultrasonido para estudiar la anatomía, fisiología o fisiopatología del corazón y los grandes vasos; el Doppler utiliza el ultrasonido para el estudio de la sangre circulante a través de las estructuras mencionadas. La ecocardiografía inicia en los años cincuenta del siglo pasado con el modo M, que registra el movimiento de las estructuras cardiacas; los primeros informes acerca del Doppler aparecen en la década de los sesenta. A partir de entonces, los avances tecnológicos de la ecocardiografía Doppler han aumentado de manera acelerada en los últimos 15 años.

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2012-02-29   |   420 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 42 Núm.4. Julio-Agosto 2004 Pags. 277-279 Rev Med Inst Mex Seguro Soc 2004; 42(4)