Autores: Castellanos Ramiro, Lobo Márquez Lilia Luz, González Sergio D.
La fibrilación auricular coexiste con la insuficiencia cardÃaca en un 15% a un 30% de los casos. A medida que la insuficiencia cardÃaca avanza, aumenta la prevalencia de esa arritmia, que tiene valor predictivo independiente de mortalidad cuando la insuficiencia cardÃaca es moderada, con fracción de eyección mayor del 35% y presión capilar pulmonar menor de 16 mmHg. Cuando la disfunción cardÃaca es severa, el pronóstico lo marca el grado de compromiso hemodinámico. Las drogas amiodarona y dofetilide sirven para revertir y mantener el ritmo sinusal. Actualmente sabemos que el control de frecuencia no es peor que el control del ritmo. La irregularidad de los R-R serÃa la causante principal de los sÃntomas y de la pérdida de la capacidad funcional. Probablemente la terapéutica futura consista en obtener regularidad de los intervalos R-R mediante la ablación del nodo auriculoventricular y, en lugar de marcapasos VVI-R, en colocar resincronizador biventricular para tratar la disinergia que produce el marcapasos en el ventrÃculo derecho. En presencia de sustrato de muerte súbita, los resincronizadores sumados a los cardiodesfibriladores amplÃan el horizonte terapéutico. Sin embargo, la persistencia de la fibrilación auricular podrÃa producir remodelación eléctrica de la aurÃcula y silencio endocrino, por incapacidad de producir péptido natriurético auricular, llevando al empeoramiento progresivo de la insuficiencia cardÃaca.
2012-06-13 | 361 visitas | Evalua este artÃculo 0 valoraciones
Vol. 32 Núm.3. Julio-Septiembre 2003 Pags. 351-357 Rev Fed Arg Cardiol 2003; 32(3)