Registro Regional de Miocardiopatía Dilatada en Argentina (REMIDA).

Perfil epidemiológico, clínico y uso de fármacos en 389 pacientes 

Autores: Lastiri Hugo, Beloscar Juan, Pasca Jorge, Dumont Carlos, Diez Fabián, Poy Carlos A., San Damaso José, et al

Resumen

Este Registro se realizó para identificar el perfil epidemiológico, clínico y la aplicación de las guías clínicas internacionales derivadas de los grandes ensayos clínicos en el tratamiento de pacientes portadores de miocardiopatías dilatadas (MD). Se remitió a los Servicios de Cardiología un formulario de dos páginas en el cual se requerían: datos personales y demográficos de los pacientes, fechas de primera consulta y de comienzo de los síntomas, etiología, clase funcional (según clasificación de la New York Heart Association-NYHA), datos clínicos, procedimientos diagnósticos o evaluativos agregados, terapéutica implementada e internaciones o complicaciones surgidas en el tiempo de seguimiento. Se tomó como criterio ecocardiográfico de MD lo siguiente: ventrículo izquierdo: diámetro diastólico > 3,2 cm/m2 área corporal; fracción de eyección (FE): fórmula de Teicholz o Simpson modificada. Edad promedio: 62,1 ± 14,6 años. Sexo masculino: 71,5%. Clase funcional II-III (NYHA): 76%. Etiología: isquémica 33%, chagásica 6% y en el resto no se especificó. Antecedentes: HTA 52%, dislipemia 50%, diabetes 24%. Medicamentos prescriptos: estatinas 0,8%, diuréticos 82%, bloqueo neurohormonal renina-angiotensina 93%, espironolactona > 90% en clase funcional III-IV, bloqueantes betaadrenérgicos 42% (siendo el carvedilol el más usado: 71%). En un subgrupo de 218 pacientes se realizó seguimiento de 41,9 ± 38,3 meses (rango de 1 a 184, mediana 28) con 58% de internaciones. La mortalidad se relacionó con la edad mayor, la clase funcional más comprometido y la FE más baja. Muerte: súbita 31%, por progresión de la enfermedad 27%. Mortalidad: 11,9% en el período de seguimiento. En la tasa de uso de tratamiento farmacológico, los diuréticos y el bloqueo neurohormonal del eje renina-angiotensina-aldosterona fueron óptimos, mientras que la prescripción de betabloqueantes, aunque todavía insuficiente, es muy superior en relación con registros previos en nuestro país. El uso total de fármacos que se disponen para el tratamiento evidencia una buena adherencia a las guías clínicas actuales cuando las aplican médicos cardiólogos, pero debe ser superado.

Palabras clave:

2012-06-13   |   456 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 32 Núm.2. Abril-Junio 2003 Pags. 227-234 Rev Fed Arg Cardiol 2003; 32(2)