Autores: Berroa F, Gastaminza Lasarte G
Introducción Un alérgeno oculto puede definirse como la presencia insospechada, en un producto que se considera seguro, de una sustancia a la que se es alérgico. La presencia de una sustancia a la que se es alérgico o intolerante puede ocurrir en medicamentos, alimentos y otros productos (por ejemplo, productos de higiene personal, artículos de uso médico, etc.). Los alérgenos de origen alimentario y el látex suelen producir reacciones de hipersensibilidad de Tipo I (mediadas por IgE), las cuales son dosis-independientes, por lo que pueden desencadenarse tras la ingesta de pequeñas cantidades de alérgeno, o bien en algunos casos incluso por la inhalación de alérgenos alimentarios contenidos en los vapores de la cocción. Esto no es incompatible con que no todos los pacientes alérgicos tienen un grado de alergia igual de intenso. Habitualmente, el grado de alergia se correlaciona –no linealmente- con los niveles de IgE específica frente al alérgeno en cuestión. Por lo tanto, aunque las reacciones mediadas por IgE son dosis-independientes, normalmente existe una dosis-umbral que puede desencadenar la reacción, y que en algunos pacientes es extremadamente baja. Estos pacientes son auténticos detectores, sabuesos, del alérgeno. Y son pacientes de riesgo.
2012-06-14 | 301 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 41 Núm.395. Diciembre 2011 Pags. 295-306 Ped Rur Ext 2011; 41(395)