Historia de la Odontología:

El cepillo dental 

Autor: Muñoz Velázquez Catalina

Fragmento

Pequeño en tamaño, pero grande en utilidad, el cepillo dental data desde 3,500 antes de Cristo. Antiguamente, los babilonios y egipcios utilizaban los “palos de mascar”; éstos se construían con pequeñas ramitas de palma llamada areca que se machacaban para ablandarlas. Eran ásperas y similares a los palillos de dientes actuales, con un extremo que se moldeaba hasta adelgazarlo en forma de filamento, lo suficientemente suave para no lastimar las encías. También se usaban ramas desgastadas y en algunas culturas se masticaban ramitas de plantas con grandes propiedades aromáticas para limpiar los dientes. Hoy en día algunas tribus africanas y australianas siguen usando útiles similares para limpiar su dentadura. Los árabes utilizaban “palos o varas para masticar” fabricados con el A. miswaak, palillo de color canela, de un palmo de longitud y del grosor de un dedo, que mojaban en agua de rosas y masticaban para limpiar sus dientes. Los griegos usaban tiras de lino, plumas de aves, huesos de animales, púas de puerco espín y cerdas de jabalí en un palo de bambú, además preferían el enjuague bucal a base de orina. Plinio el Joven (61-113 d. C.) afirmaba que utilizar el cañón de una pluma de buitre para limpiar los dientes podía producir halitosis o mal aliento, sin embargo le gustaba emplear una púa de puercoespín porque, según él, “mantenía los dientes firmes”. Aristóteles aconsejaba a Alejandro el Grande que cada mañana diera un masaje a sus dientes con un paño fino de lino que fuera ligeramente áspero.

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2012-12-06   |   682 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 8 Núm.97. Agosto 2012 Pags. 16-17 Odont Moder 2012; 8(97)