La infección del tejido pulpar siempre es ocasionada por la colonización microbiana del sistema de conductos radiculares. La enfermedad pulpar y perirradicular, en un gran porcentaje de los casos, está relacionada directa o indirectamente con los microorganismos, los cuales pueden llegar a través de varias vías de entrada. La importancia de las bacterias en la enfermedad endodóntica se demostró en el estudio realizado por Kakehashi y cols., en 1965, cuyo propósito fue observar los cambios patológicos resultantes de exposiciones pulpares no tratadas, en ratas libres de gérmenes cuando se comparaban con ratas convencionales con una microflora normalmente compleja. Estos investigadores encontraron que no ocurrían cambios patológicos en los tejidos pulpares o perirradiculares expuestos al medio ambiente bucal de las ratas libres de gérmenes, conocidas también como ratas gnotobióticas. En estos casos, se observó la cicatrización de la zona de exposición pulpar con la formación de dentina, independientemente de la gravedad de la exposición. En cambio, en animales comunes, las exposiciones de la pulpa al medio bucal, causaron desde una inflamación pulpar inicial hasta una necrosis completa y/o formación de una lesión perirradicular. Esto indica que la presencia o ausencia de flora microbiana es el principal factor determinante en la destrucción o cicatrización de las pulpas de roedores expuestas. Las fuentes de bacterias infectantes suelen ser la caries dental y la contaminación salival a través de fracturas, grietas o restauraciones con filtración. La caries dental sigue siendo la vía de entrada más común a través de la cual las bacterias y los productos secundarios de éstas llegan al espacio pulpar. A través de los túbulos dentinarios permeables, los microorganismos invaden y se multiplican dentro de estas estructuras. Los túbulos dentinarios miden, aproximadamente, 2.5 micrones cerca de la pulpa y un micrón en las uniones amelodentinaria y cementodentinaria. Otra vía de entrada es la enfermedad periodontal, debido a la relación anatómica que existe entre el tejido conjuntivo pulpar y periodontal, que permite el paso de bacterias en ambos sentidos a través de conductos laterales, túbulos dentinarios, membrana periodontal, foramen apical, drenaje vasculolinfático común y permeabilidad dentinaria.
2012-12-06 | 6,566 visitas | 2 valoraciones
Vol. 9 Núm.100. Noviembre 2012 Pags. 12-15 Odont Moder 2012; 9(100)