Transfusión sanguínea.

Uso racional 

Autor: Delgado Ramírez Martha Beatriz

Fragmento

La transfusión sanguínea es una estrategia utilizada frecuentemente con propósitos terapéuticos, y en ocasiones con fines preventivos, en diferentes escenarios hospitalarios. Es indudable su valor en diversas circunstancias clínicas para mejorar la capacidad transportadora de oxígeno del paciente; sin embargo, cada día son más los reportes de investigación que indican que esta terapia conlleva múltiples riesgos para el paciente, por lo cual es necesario su uso racional. En el pasado, las complicaciones más temidas fueron la transmisión de enfermedades infecciosas y las reacciones hemolíticas por incompatibilidad ABO, que con el desarrollo de técnicas de laboratorio y el diseño de protocolos para donación y administración de las transfusiones han reducido significativamente su frecuencia y han permitido incrementar ostensiblemente la seguridad del paciente. Hoy en día, aunque todavía persiste un riesgo menor de transmisión de infecciones y de reacciones hemolíticas mayores, hay una serie de potenciales efectos adversos entre los que se encuentran: reacciones alérgicas, dan˜ o pulmonar agudo asociado a transfusión (TRALI, del inglés transfusion related acute lung injury), reacciones hemolíticas tardías, reacciones por sobrecarga circulatoria, alteraciones metabólicas como hipocalcemia e hipercalemia, alteración de la inmunomodulación que conlleva mayor susceptibilidad para las infecciones, mayor riesgo de recurrencia de cáncer y la posibilidad de reactivación de virus latentes en el paciente. Todos estos posibles riesgos demandan la toma de decisiones claramente sustentada en evaluaciones de efectividad de esta terapia, que indiquen al cuerpo médico en diversos ámbitos cuándo está indicada la transfusión de los diferentes hemoderivados.

Palabras clave:

2013-03-11   |   691 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 40 Núm.4. Octubre-Diciembre 2012 Pags. 247-248 Rev col anest 2012; 40(4)