Particularidades de la aterosclerosis carotídea en pacientes con infarto cerebral aterotrombótico del territorio homónimo, según la angiotomografía

 

Autores: González Méndez Melvis, González López Ariel, Pérez González Raquel, Arrieta Hernández Tania, Martínez Rodríguez Yania

Resumen

Introducción:<7/> la enfermedad cerebrovascular en Cuba constituye la tercera causa de muerte, siendo la aterosclerosis su causa primordial y teniendo ambas como resultado final la incapacidad y la pérdida de la calidad de vida. La causa más frecuente en Cuba es el infarto cerebral aterotrombótico. Objetivo: describir las particularidades de la aterosclerosis carotídea en pacientes con infarto cerebral aterotrombótico del territorio homónimo, según la angiotomografía. Métodos: se realizó un estudio observacional, descriptivo, transversal en 42 pacientes con diagnóstico clínico y tomográfico de infarto cerebral aterotrombótico de territorio anterior, a los que se les realizó angiotomografía carotídea. Resultados: las placas de ateroma que predominaron en ambos ejes carotídeos fueron las mixtas, las que representaron el 50 % en el eje carotídeo derecho y el 42,9 % en el eje izquierdo. La superficie de la placa que más afectó al eje derecho fue la irregular, para el 54,8 %, al igual que en el eje izquierdo, para el 52,4 %. El rango de estenosis predominante en la carótida izquierda, estaba entre el 70 y 99 % en 18 pacienes (42,9 % ), y en la carótida derecha, entre 50 y 69 %, en 14 afectados (33,3). Conclusiones: dominaron las placas mixtas, la inestabilidad de los ejes, la superficie irregular y la estenosis significativa. La afectación aterosclerótica ocurre bilateralmente, siendo las zonas de bajo shear stress los sectores de mayor gravedad y el eje derecho es más afectado que el contralateral.

Palabras clave: Aterosclerosis carotídea infarto cerebral aterotrombótico Ictus angiotomografía.

2013-03-28   |   468 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 13 Núm.1. Enero-Junio 2012 Pags. Rev Cubana Angiol y Cir Vasc 2012; 13(1)