Resumen

En el presente trabajo se lleva a cabo una crítica de los puntos de vista que asignan a los seres humanos un principio organizativo y explicativo (naturaleza), fundados en el egoísmo, la territorialidad, la propiedad privada, la tendencia a la acumulación y la violencia, básicamente iguales a los de los otros animales. Este punto de vista biologicista está presente desde mediados del siglo XIX y -a pesar de sus posiciones opresivas, racistas, sexistas y de sus fallas metodológicas-, se ha mantenido a lo largo de más de 150 años, cobrando un auge importante desde mediados del siglo XX, con el descubrimiento de la estructura de los ácidos nucleicos en 1953. Dos expresiones de estas formas deterministas de pensamiento surgen en este período: la sociobiología, a mediados de los años 70, y la psicología evolutiva, desde inicios de los 90. Se abordan elementos de crítica a estas expresiones del determinismo biológico, contraponiéndoles a ambas la tesis de que el ser humano es uno de los saltos dialécticos cualitativos de la evolución. A las expresiones socialdarwinistas, arriba mencionadas, se les caracteriza como evolucionismo vulgar o pseudociencia, debido a que están construidas no con base en una comprensión objetiva de la realidad sino con la inserción de elementos ideológicos y a una visión del proceso evolutivo explicado con arreglo a principios mercantiles del mundo, observados desde un punto de vista histórico. Esta crítica se lleva a cabo utilizando la noción marxista de ideología y los principios dialécticos sostenidos por Richard Lewontin, Richard Levins y Berter Ollman.

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2013-04-22   |   436 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 4 Núm.4. Octubre 2012 Pags. 4-15 PACAL MEDLAB 2012; 4(4)