El Síndrome de Cushing es secundario a la presencia de niveles sanguíneos elevados de cortisol en forma crónica, ya sea por una producción endógena elevada o por la administración exógena de los mismos. La aplicación tópica de esteroides de alta potencia en grandes áreas de superficie corporal puede ser un factor desencadenante. Se presenta el caso de un niño de 3 años de edad con psoriasis en placas en forma diseminada, tratado con dipropionato de betametasona por un periodo de diez semanas, presentando un síndrome de Cushing, documentándose la supresión adrenal secundaria.
2013-07-29 | 1,043 visitas | 2 valoraciones
Vol. 4 Núm.7. Septiembre-Febrero 2013 Pags. 42-46 EDEMM 2013; 4(7)