Fragmento

Odontología y enfermedad El ser primitivo, desde su aparición en la tierra, creyó percibir que las enfermedades no se generaban por causas naturales, sino por obra de los espíritus enemigos, demonios o brujerías, por lo que era necesario combatirlas por medio de encantamientos mágicos y hechicerías. Las oraciones, sacrificios y ceremonias rituales eran también empleados por ellos como medios de curación por el poder de sugestión que se suscitaba. En la percepción andina, la enfermedad es parte de las relaciones del hombre con sus supuestos dioses y deidades. El que generó el divorcio médico del pensamiento mágico, para hacernos ver que las enfermedades provenían de causas naturales, se llamó Hipócrates y vivió en Grecia.

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2013-09-27   |   560 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 12 Núm.1. Enero-Junio 2013 Pags. 57-68 Odontol Pediatr 2013; 12(1)